Una vez
conocidos los hechos, el Equipo de desactivación de Explosivos de la Guardia
Civil de Valencia, se desplazaron al lugar de los hechos, comprobando que se
trataba de un proyectil de artillería de 105 mm de calibre y con espoleta de
impacto, el artefacto que podría datar de la pasada Guerra Civil.
El proyectil fue trasladado por los
especialistas para su posterior destrucción en una zona segura de Requena. Se mantuvieron en todo momento las medidas de
seguridad pertinentes.
Desde la Guardia Civil de Valencia se recuerda que
la forma de actuar ante el hallazgo de algún artefacto explosivo consiste en no
tocar, ni manipular el objeto y avisar
de inmediato a la Guardia Civil a través del 062.