El proyecto tiene como objetivo incrementar la seguridad vial a través de diversos trabajos de conservación y mantenimiento sobre la plataforma actual; la renovación y actualización de la señalización, balizamiento y defensas de la vía; y el repavimentado y regularización de peraltes en curvas. Las obras también incluyen recuperar la carretera en los tramos donde es posible, con el fin de conseguir una plataforma de seis metros de ancho.
Para el diputado de Carreteras e Infraestructuras, Rafa García, este tipo de actuaciones “son una prioridad para la corporación provincial, ya que uno de sus cometidos principales es mejorar las infraestructuras en esta y otras comarcas de interior en las que existe un importante riesgo de despoblación”.
Antecedentes
La CV-450 une los municipios de Requena y Utiel recorriendo diferentes aldeas situadas en la vega del río Magro. Hasta hace unos años fue un camino municipal que se encontraba en muy mal estado, pero tras la aprobación en 2019 del nuevo Catálogo del Sistema Viario, se catalogó como carretera y la Diputación comenzó las actuaciones para su mejora.
En 2020 se llevó a cabo la primera actuación que mejoró la carretera entre la aldea del Azagador y el desvío a San Antonio. Con esta segunda actuación se dará por concluida la mejora de toda la carretera.
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