20.04.2017.- La tormenta de pedrisco que descargó con virulencia durante la tarde del martes sobre una amplia franja de terreno en la comarca de Utiel-Requena ha causado graves daños en los cultivos de la viña –muy especialmente- y –en menor medida- de la almendra y del trigo. La Asociación Valenciana de Agricultores (AVA-ASAJA) estima, en una primera valoración, que la cuantía de los perjuicios ocasionados por la piedra asciende a unos 11 millones de euros. La granizada descargó con intensidad a lo largo y ancho de una superficie de 10.000 hectáreas de Utiel-Requena. Las zonas de Campo Arcís, Los Duques, Las Casas, Los Corrales, Los Pontones y Caudete de las Fuentes se encuentran entre las más afectadas.
El viñedo es, con diferencia, el cultivo que se ha llevado la peor parte, con grados de afección que en algunas explotaciones llegan hasta el 80% de la cosecha. En estos momentos, estaban brotando las primeras yemas de las cepas y la pérdida de las mismas por los efectos del pedrisco implica una sustancial reducción de la futura cosecha, ya que los llamados conos secundarios, característicos de la segunda fase de la brotación, producen una cantidad de uva sensiblemente inferior. Del total de las 10.000 hectáreas afectadas por la tormenta de piedra, alrededor de 9.000 corresponden al viñedo, lo que permite estimar el coste de las pérdidas económicas en torno a los 10,8 millones de euros.
Almendro y trigo se reparten el resto de esa superficie total de 10.000 hectáreas y de los daños globales de unos 11 millones que conforman el desolador balance de esta última y violenta granizada. En el caso del almendro, el temporal ha tirado al suelo parte del fruto que estaba iniciando el periodo de cuajado, mientras que en trigo ha causado destrozos en parte de las espigas que comenzaban a crecer.
Reducción de las ayudas
Esta pésima noticia coincide en el tiempo con el anuncio efectuado hoy en Valencia por los responsables de Enesa –la entidad pública dependiente del Ministerio de Agricultura que diseña y gestiona los seguros agrarios– de que el nuevo plan de seguros para 2017 incluye un recorte de 10 puntos en la subvención base de todas las líneas y en todos los cultivos, una decisión que se traducirá en un encarecimiento medio de las pólizas superior al 20%. De este modo se confirman los peores augurios, ya que el Gobierno, y pese a las reiteradas peticiones formuladas por AVA-ASAJA, no ha modificado el borrador de su programa de seguros para este año en el que ya se recogía su voluntad de rebajar el apoyo a la contratación de esta herramienta fundamental para los agricultores, tal como denunció esta organización agraria el pasado mes de octubre.
“Lamentablemente, -apunta el presidente de AVA-ASAJA, Cristóbal Aguado- el Gobierno ha hecho oídos sordos a nuestras reclamaciones, y va a llevar a cabo una reducción de las ayudas que tendrá consecuencias muy negativas para el sector agrario porque va a dificultar extraordinariamente que miles de agricultores pueda asegurar sus cosechas. Al Gobierno le ha faltado sensibilidad en este tema y parece no entender que somos un sector descapitalizado y en crisis”.
Además, el máximo responsable de AVA-ASAJA señala al respecto que esta decisión va a tener “un efecto desincentivador de primer orden a la hora de contratar el seguro” y recuerda que el recorte llevado a cabo en 2013 sobre esta misma partida supuso que el número de pólizas suscritas en el viñedo bajase entonces un 60%, mientras que la caída en cítricos fue del 30%.