13.03.2020.- Carles Peris, secretario general de La UNIÓ, es
rotundo al respecto: “Sin agricultores y ganaderos no hay alimentos; somos el
primer eslabón que mueve la cadena agroalimentario y más necesarios que nunca
ante este tipo de crisis”.
Cabe recordar que en estos momentos los productores trabajan
aún más si cabe para seguir cumpliendo el objetivo de suministrar estos
alimentos a los ciudadanos y que no exista desabastecimiento en los lineales.
También anima a los consumidores a que cubran la demanda
actual con buenos productos de proximidad y no con importaciones, que serán
ahora mucho menos necesarias.
LA UNIÓ considera que los productores contribuyen con el
abastecimiento de alimentos básicos a la población y que hay que garantizar que
estos sean suministrados en condiciones de normalidad y que se mantengan las
redes de distribución habituales. Hay que recordar que los alimentos producidos
con la normativa europea garantizan los estándares de calidad alimentaria, más
necesaria que nunca en la actual situación.
Para La UNIÓ es muy importante también que las
Administraciones no dificulten la comercialización de frutas y hortalizas de
los agricultores en mercados no sedentarios, respetando las debidas
preocupaciones. Por este motivo, pide el compromiso de las administraciones
para que tengan en cuenta el abastecimiento de producto fresco y de proximidad
y no crear situaciones de agravio comparativo a los productores
agroalimentarios del país respecto a otros tipos de alimentos.
“Es un contrasentido que no se ponga impedimento alguno a
las compras en las grandes superficies o supermercados que concentran
diariamente miles de consumidores en instalaciones cerradas y que, sin embargo,
se pueda sentir la tentación de prohibir que se celebre un mercadillo local en
un pueblo en un espacio abierto. “A ver si le vamos a poner pegas a que el
agricultor local venda sus calabacines o cítricos en la plaza del pueblo y no a
las naranjas de Egipto o las judías verdes de Marruecos del super”, avisan
desde La UNIÓ.