La Unión de Uniones de Agricultores y Ganaderos, la
organización en la que se integra LA UNIÓ de Llauradors en el ámbito estatal,
tras la publicación por parte del Ministerio de la segunda estimación de renta
agraria, piensa que el informe debiera revisarse y acompañarlo con la renta
real de los agricultores profesionales.
Unión de Uniones considera que, a través del dato teórico y
global que utiliza el Ministerio para calcular la renta agraria, esta
información describe describen una situación que en absoluto se corresponde con
la realidad que viven en sus explotaciones los agricultores y ganaderos
profesionales, tal y como se desprende de la comparativa con los datos
fiscales, que indican rendimientos muy por debajo de los expuestos por
Agricultura.
La segunda estimación de renta agraria del Ministerio de
Agricultura elevaría los primeros cálculos realizados en diciembre pasado,
arrojando, como resultado final, que en 2016 la Renta Agraria Total se habría
incrementado respecto del año anterior en un 6,9 % a precios corrientes,
estableciendo la Renta teórica por Unidad de Trabajo año en 30.871 euros, lo
que contrasta fuertemente con los datos reales de la Agencia Tributaria que
están muy por debajo.
No más renta, sino menos ocupación
El sistema utilizado por el Ministerio de Agricultura para
sus cálculos sigue el procedimiento homologado por la Unión Europea. No
obstante, según la organización, con el mismo sistema se dan situaciones
especialmente llamativas, como por ejemplo, que los consumos intermedios
supongan en el caso de España en la media de los últimos años aproximadamente
un 34 %; mientras que en Francia sería de un 56 % y en Alemania un 71 %. Estos
datos, tal y como analiza Unión de Uniones, conducen a resultados tan sorprendentes
como que el Valor Añadido Bruto (renta antes de amortizaciones, impuestos y
otras subvenciones) por hectárea en España duplicaría el de Alemania y estaría
un 31 % por encima de la de Francia, datos que dan que pensar y alimentan las
dudas sobre el sistema.
“En cualquier caso, aun así, y con los propios datos del
Ministerio, la renta del sector agrario en términos constantes (es decir
considerando la inflación) estaría en 2016, y lo habría estado entre 2006 y
2016 sin excepción, por debajo de las cifras de la década precedente, entre
1995 y 2005.” –apuntan desde Unión de Uniones – “Por lo tanto, si la renta por
Unidad de Trabajo año ha mantenido estadísticamente una cierta evolución
positiva se debe, no a una mejora global de los resultados del sector, sino a
la caída en un 19 % del número teórico de ocupaciones en el sector a tiempo
completo” - añaden
Sólo un tercio de profesionales
2.600 euros anuales por declarante de rentas agrarias
Por otro lado, las cifras de renta por unidad de trabajo año
que arroja el modelo estadístico utilizado por el Ministerio para sus
estimaciones, contrasta significativamente con el escenario que muestran los
datos fiscales. La Agencia Tributaria, en su memoria más reciente, de 2014,
recoge que hay cerca de 983.000 contribuyentes de actividades agrarias en
Estimación Objetiva, por el que tributan aquellos con rendimientos íntegros por
debajo de los 250.000 euros anuales y que constituyen prácticamente 93 % de los
declarantes de actividades agrarias, donde se concentran la mayor parte de los
pequeños y medianos agricultores profesionales.
Según estudia la organización estos 983.000 agricultores y
ganaderos habrían declarado unos rendimientos fiscales netos por su actividad
de alrededor de 2.500 millones de euros, lo que representaría unos rendimientos
netos por declarante de poco menos de 2.600 euros. Incluso, considerando la
desviación que puedan provocar muchos pequeños declarantes para los cuales la
renta agraria no representa ni una cuarta parte de sus rentas total, que son
aproximadamente la mitad, la discrepancia es demasiado importante como para ser
ignorada.
Unión de Uniones da por descontados la buena fe de los
técnicos en el tratamiento de los datos tenidos en cuenta. No obstante, siendo
conscientes del uso que finalmente hacen los políticos de dichos datos, cree
que las estimaciones de renta del Ministerio de Agricultura no son un reflejo
fiel de la situación de los agricultores y ganaderos y que, al margen de las
estadísticas obligadas por el Sistema Integrado de Cuentas Nacionales y
Regionales de la UE, convendría un mejor ajuste y análisis de las mismas para
extraer datos más cercanos a la realidad de los agricultores y ganaderos que
tienen en esta actividad su medio fundamental de vida.